La inseguridad en Ecuador alcanza niveles históricos y se convierte en prioridad para el próximo Gobierno
La inseguridad en Ecuador ha alcanzado niveles históricos y se ha convertido en la principal preocupación de los ecuatorianos. Con un aumento alarmante de la violencia, el país está en camino de cerrar el año 2023 con una tasa de homicidios de 40 por cada 100.000 habitantes, situándose como el más violento de la región.
Los crímenes violentos se han extendido más allá de la ciudad de Guayaquil y han llegado a otras ciudades como Durán, Manta, Quevedo y Quito. Los ataques ocurren a cualquier hora del día y afectan a todo tipo de objetivos, desde tiendas de barrio hasta unidades judiciales donde se realizan audiencias. Incluso los niños se han convertido en víctimas de esta ola de violencia.
Las estadísticas de la Policía revelan que entre enero y junio de este año se han registrado 3.513 asesinatos, lo que representa un aumento del 58% en comparación con el año anterior. Ante esta situación, los ocho binomios que participarán en las elecciones presidenciales y legislativas anticipadas reconocen que la inseguridad es la principal preocupación de los ecuatorianos.
La falta de equipamiento policial y la necesidad de implementar políticas públicas efectivas en seguridad son algunos de los desafíos que el próximo Gobierno deberá abordar de manera prioritaria. Los candidatos han incluido en sus planes de gobierno propuestas como el fortalecimiento de la fuerza pública, la depuración de la Policía, reformas al sistema judicial y penal, control de las cárceles y la lucha contra la delincuencia organizada transnacional.
Sin embargo, existen preocupaciones sobre cómo algunos candidatos plantean abordar la seguridad, ya que propuestas como el trabajo forzado para los presos o penas proporcionales al tiempo de vida de las víctimas generan debates sobre derechos humanos y el enfoque de «mano dura». Expertos en seguridad y analistas políticos enfatizan la importancia de priorizar la seguridad con claridad y experiencia, evitando la improvisación que ha llevado al país a la situación actual.
Ecuador se prepara para las elecciones presidenciales y legislativas anticipadas que se llevarán a cabo el próximo 20 de agosto. Los resultados de estos comicios tendrán un impacto crucial en la lucha contra la inseguridad y en la búsqueda de soluciones efectivas para combatir la violencia que afecta a la sociedad ecuatoriana.
